Breve biografía

Tengo 50 años y he desarrollado muchas actividades profesionales a lo largo de mi vida. Soy licenciado en ingeniería eléctrica y automatización. A los 48 años, después de estar desempleado durante cierto tiempo, decidí montar mi propio negocio. Actualmente, tengo una tienda de componentes electrónicos: www.lojapm.pt. Ha sido un viaje de aprendizaje diario. A pesar de todas las habilidades que he adquirido a lo largo de mi vida, nunca antes había sido empresario.

Mi historia

Ser empresario significa que, de un momento a otro, hay que acumular muchas profesiones, como gerente, contable, vendedor, diseñador, director de marketing, etc.

Basándome en esta experiencia, presentaré mi visión del aprendizaje de adultos en el futuro, simulando lo que espero encontrar cuando lleguemos al año 2050.

Estamos en el año 2050. Hay menos alumnos en la enseñanza básica y secundaria superior y muchos más estudiantes mayores que ya han hecho del aprendizaje permanente su rutina diaria.

En Portugal hay ya casi 800.000 personas mayores de 85 años, es decir, prácticamente el doble de las que teníamos en 2023. Por esta razón, cada vez hay menos personas en edad de trabajar y más personas mayores (por cada 10 mayores, solo hay 15 personas en edad de trabajar cotizando a la seguridad social. En 2023, eran 27). Pero estas personas mayores no son como las que yo conocí cuando era adulto, que se dedicaban a la fotografía, la cerámica, la música, el inglés o las clases de informática, más para entretenerse y socializar que para un uso práctico. Ahora tenemos que trabajar casi 15 años después de los 65 años. Por tanto, no podemos dejar de aprender.

Afortunadamente, hoy en día el trabajo es mucho más digital que manual y casi todo el mundo de mi edad trabaja y aprende desde casa. Esto nos ayuda a tener una vida más descansada, con más calidad, y también a contaminar menos el medio ambiente con desplazamientos innecesarios.

Aprendemos a utilizar las nuevas tecnologías a través de clases digitales y con los robots que tenemos en casa. Estos robots aprenden con nosotros y luego apoyan nuestro aprendizaje. Las clases iniciales son con profesores de verdad, pero luego seguimos aprendiendo con nuestros robots. Son unos ayudantes valiosos: cocinan, limpian la casa, nos enseñan a trabajar con las nuevas tecnologías, repiten lo que se ha dicho en clase (ya que a menudo olvidamos lo que se ha dicho). También nos recuerdan que tenemos que tomar la medicación y organizan nuestra agenda.

Hoy tengo clase de gimnasia a las 9:30, una reunión de trabajo online después de comer, la compra a las 17:00 y a las 21:00 me uniré a mi club de electrónica, online, donde me reúno con varios colegas y amigos. Es un foro de debate con gente a la que le gusta la electrónica para mantenerse al día. En este foro, enseñamos y aprendemos unos de otros.

Olvidé decir que mi negocio ha crecido y hoy administro la tienda PM solamente usando mi ordenador. Ya he conseguido contratar empleados para que abran mi tienda y realicen ventas sin mí. Así que también tengo que gestionar los RR. HH. y asegurarme de que reciben la formación necesaria para estar constantemente actualizados. Uno de estos cursos está relacionado con la robótica y la programación, ya que los empleados también tienen que saber programar ordenadores para las tareas diarias. La mayoría de las ventas se realizan por internet y la mitad de mis empleados son robots que conviven pacíficamente con los humanos. Cuando tengo que ir físicamente a la tienda, viajo en mi coche que se conduce solo. La profesión de conductor ha desaparecido y si quiero conducir yo mismo tengo que tener un seguro de coche con una cobertura más amplia.

Aprender a lo largo de mi vida es lo que me ha permitido triunfar. Y he aprendido de diferentes maneras: con profesionales de la educación y la formación de adultos humanos, en formaciones específicas que he querido hacer, a través de MOOC, con búsquedas en internet y viendo vídeos en YouTube, con enseñanzas transmitidas por el robot y la inteligencia artificial presentes en casa, con mis empleados, leyendo libros, con familiares, amigos e incluso desconocidos en las comunidades que tengo en internet.

He aprendido de diferentes maneras y en muchos lugares, siempre porque lo necesitaba y me motivaba a hacerlo. Además, he tenido y tengo muchos profesores que son diferentes del típico perfil de profesor que conocí cuando tenía 50 años. Trabajamos juntos compartiendo conocimientos y ayudándonos mutuamente.

Aprender está al alcance de cualquiera, pero necesitamos estar motivados para seguir aprendiendo. Aprendemos porque queremos y porque lo necesitamos. Nunca es por obligación.

¿Tres competencias para el futuro del aprendizaje de adultos?