"Saltando obstáculos, poniendo puentes". Tercer libro del docente, formador y comunicador Pedro Alarcón



Con su tercer libro “Saltando obstáculos, poniendo puentes” (Ed. Octaedro. 2024), Pedro Alarcón Gómez, docente, formador y comunicador pone una vez más el foco de atención sobre algunos de los retos y oportunidades a las que se enfrenta la educación hoy. Especialmente ocupado y preocupado por todo lo que tiene que ver con la digitalización del ámbito educativo, los aportes de la neurociencia, el ámbito social de lo educativo y la creciente presencia de la Inteligencia Artificial. Creemos que para los que trabajamos en torno a la educación a lo largo de la vida es una publicación de interés, especialmente si se presenta con la frescura y energía con la que Pedro aborda todo lo que hace. Apasionado de su trabajo, Licenciado en Ciencias de la Educación, le avala una extensa trayectoria profesional desde el día a día en el Colegio Virgen del Carmen de Toledo trabajando con los alumnos que presentan especiales dificultades de aprendizaje. Pero su labor y aportaciones van más allá, como vocal del Consejo Social de la UCLM, también formó parte de los equipos que desarrollaron el currículo LOMLOE en Castilla-La Mancha, ha sido formador de docentes y padres a través de Escuelas Católicas, en el programa Toledo Educa del Ayuntamiento de Toledo, en la propia UCLM, etc. Su andadura profesional y experiencia se ha volcado en diversos artículos y de manera especial en sus libros “Pedagogía de andar por casa” (Ed. San Pablo 2012), “Conecducamos. La Educación es conexión. Donde neurociencia y pedagogía conectan” (Ed. San Pablo 2020).
- Pedro, háblanos de tu última publicación “Saltando obstáculos, poniendo puentes”. ¿Qué quieres aportar con ella y a quién la diriges?
- Como docente con una dilatada experiencia ¿cuáles crees que son los retos a los que se enfrentan alumnos, padres y docentes en este momento?
- La Inteligencia Artificial es un desafío al que nos enfrentamos a gran velocidad ¿qué nos puedes decir sobre ello?
- En referencia a la educación a lo largo de la vida ¿cómo crees que tu propuesta podría aportar en este ámbito educativo que tiene cada vez más importancia?
- ¿Podrías profundizar en el concepto “puentes” que utilizas de manera recurrente en tu obra?
- En tu opinión ¿qué papel debe jugar el concepto de educación a lo largo de la vida, la educación de adultos, en nuestro contexto social y cultural?
- El prólogo de tu libro lo ha escrito la prestigiosa química y profesora Neus Sanmartí, que incide en muchas ocasiones en la importancia de “educar para la vida”, ¿ha sido una inspiración para ti?
Empezaré por la segunda parte de la pregunta, mientras trabajaba en esta publicación, siempre pensé en docentes y estudiantes, padres y madres. En cuanto a lo que pretendo aportar, diría que es poner al alcance de la mano de quienes lo lean, una gran cantidad de saberes y experiencia que con el tiempo he adquirido y madurado y que considero, pueden aportarles estrategias, técnicas e ideas, que conociéndolas favorecerán en gran medida, su labor educativa. Por eso, la frase de la portada ¡Educamos juntos!
Ya sabemos que son muchos, siempre lo han sido y seguirán siendo, pues conseguir y superar retos forma parte de la vida y de la propia educación. Me centraré en algunos que considero de especial importancia en este momento.
Para docentes: mejorar la evaluación, el estudiante no aprende para ser evaluado, es evaluado para aprender. Pasar de calificar a evaluar. Así fomentaremos aprender para saber, no solo para aprobar. Para ello, tenemos que aplicar más la evaluación formativa.
Formación. Los docentes necesitamos más formación. No puedes conformarte con lo que sabes. Los estudiantes necesitan y tienen derecho a los mejores docentes. Para ser un buen docente, no puedes conformarte con lo que sabes de la universidad o algún que otro curso online. La formación tiene que ser continua y si es presencial es de más calidad, sin duda. En este punto, las administraciones tenían que exigir más al docente, una formación regular, continua y de calidad.
Trabajar cooperativo: Favorecer y potenciar más el trabajo en equipo. Las interacciones entre estudiantes producen grandes aprendizajes, pues ponen en juego la habilidad para enseñar y para aprender de manera natural y espontánea. Además, potencia la atención de la diversidad, favoreciendo la inclusión. Por otra parte, saber trabajar en equipo es prioritario dentro del mercado laboral y el trabajo cooperativo es una buena base.
Las pantallas no tienen que ser protagonistas, como han sido hasta ahora, en muchos centros educativos y para muchos docentes. Tenemos un cerebro social al que le gusta aprender de los demás, interactuar con los demás, aprender en papel y mirar a los ojos. Ser conscientes de que el uso excesivo de la pantalla tiene más inconvenientes que ventajas.
La inclusión, la diversidad necesita que los docentes dediquen espacios, tiempos, creatividad, ingenio, formación y metodologías innovadoras que favorezcan y faciliten el aprendizaje y la inclusión de los estudiantes. La inclusión es equidad, y tenemos que saber dar a nuestros estudiantes, lo que necesitan. Las diferencias deben marcar propuestas, estilos, metodologías distintas, estrategias y técnicas diversas y los docentes tenemos que conocerlas para saber atender esas diferencias.
Para estudiantes: Saber dar el espacio y la importancia adecuada a todo lo relacionado con internet. Entender que aprender es importante no solo por la calificación, es importante por el hecho de aprender y saber, para ser mejor persona. Vincularse con el desarrollo sostenible del planeta y el bien común. Y potenciar más los valores.
Para madres y padres: Confiar más en el profesorado y trabajar en la misma línea educativa, contrastando opiniones y apoyo mutuo. Trabajar más la educación en valores, si la calificación es importante, la educación en valores lo es aún más. Enseñar el uso adecuado de las pantallas, restringir y su uso regulando tiempos, y volver a potenciar las interacciones personales en el ámbito familiar.
Formación, educar no es fácil, la formación es importante para tener estrategias y técnicas que permitan educar de una manera más adecuada y optima. Cuanto más sabes, más posibilidades tienes de hacerlo mejor.
La inteligencia puede ser la habilidad de aprender, comprender y aplicar conocimientos, mientras que la sabiduría se refiere a la capacidad de utilizar ese conocimiento de manera efectiva para tomar decisiones acertadas de manera empática, comprensiva, humana y con sentido común.
El ser humano presta sus conocimientos e inteligencia, a lo que ahora es la inteligencia artificial, y está puede devolvérselos, en un clic, lo facilita algunos trabajos. Pero lo que nunca podrá prestarle es su sabiduría, por lo tanto, la I.A tiene una gran limitación. Por ese motivo, siempre es más fiable, razonable y mejor, el aprender de los demás y basar el aprendizaje en las interacciones entre personas.
Inteligencia sin sabiduría, puede ser un riesgo. Por eso, las personas tenemos que poner todo el saber y entendimiento para usar esta herramienta. Nunca una inteligencia artificial puede sustituir la sabiduría natural de las personas, pues cuando aplicamos esta sabiduría, entran en juego emociones y sentimientos que son la base de nuestro progreso y bienestar, la esencia de nuestra vida. Por tanto, dejemos su espacio a esta inteligencia artificial, usémosla como una herramienta de información y sigamos manteniendo la confianza en la sabiduría natural humana que siempre será más importante. En educación las pantallas pueden dar respuesta a preguntas concretas, pero las respuestas a las verdaderas preguntas, a las preguntas esenciales, está en las miradas, en los gestos, en las palabras y acciones que intercambian las personas.
La propuesta habla de educación, de la manera que el cerebro aprende, de las estrategias y técnicas que favorecen el aprendizaje y la motivación, de aspectos importantes de la comunicación en la acción de educar, todo ello, se mantiene e influye en gran medida en la educación de la persona durante toda la vida. Por ese motivo, todo cuanto hace referencia a estos aspectos de la educación, son aportes básicos e importantes que conviene conocer y saber.
Los puentes están para unir espacios, para poder seguir caminando cuando parece que un obstáculo puede impedirlo, para favorecer el encuentro de una orilla con otra. El puente, por tanto, permite unir, encontrarse y seguir. La educación tiene entre sus objetivos unir, encontrarse y seguir. La educación es un puente entre personas, personas que enseñan y aprenden, que caminan juntas y se encuentran tantas veces, la educación construye puentes para que la vida siga y el camino sea más fácil.
Además, cuando aprendemos, también construimos puentes en nuestro cerebro. Cuando aprendemos construimos puentes entre los conocimientos previos y los conocimientos nuevos. Estos puentes al principio son frágiles, y es la labor conjunta del docente y del estudiante, la que favorece que estos puentes sean más sólidos, consistentes y duraderos, y puedan ser la base de aprendizajes posteriores. Las conexiones neuronales son estos puentes.
Existe educación siempre que haya personas dispuestas a aprender y a enseñar. Nuestro cerebro está dotado de una gran plasticidad neuronal, eso nos permite aprender durante toda la vida. La educación ofrece siempre a las personas la posibilidad de mejorar, de crecer y favorecer y así formar parte activa del progreso y del bien común. Por lo tanto, la educación en todas las etapas de la vida tiene un gran valor, pues siempre aporta un nuevo impulso a quien forma parte de la acción educativa. Una persona adulta que quiere aprender está dando alas y motivos a su vida. Siempre es tiempo de aprender.
Neus es una fuente de inspiración para nuestra educación. He aprendido mucho de ella y continúo aprendiendo. Tiene una visión muy acertada de lo que es la educación y en concreto de la evaluación, que ya sabemos juega un papel muy importante en el aprendizaje y la educación.
Tener la oportunidad de trabajar con Neus de cerca, es todo un privilegio para un docente, te aporta gran cantidad de saberes y conocimientos con gran sencillez y cercanía. No le importa invertir el tiempo en enseñar cuando habla de educación, por eso, hace que aprender con ella sea fácil. Neus es la “profe“ que todo estudiante quisiera tener. Es un placer aprender de ella.
La educación que Neus propone, así es, cómo dices en la pregunta, es una educación para la vida. Impulsando el valor del esfuerzo, de las preguntas, del aprendizaje activo, de los tiempos pausados que invitan a corregir el error aprendiendo los motivos y comprendiendo las maneras de mejorarlo, una educación que potencia el encuentro y el vínculo entre docente y estudiante, una educación que estimula el aprendizaje del estudiante y favorece el crecimiento de la persona.
Aprovecho estas líneas para decirle, una vez más, gracias, Neus por todo lo que aportas a nuestra educación. Si tenéis oportunidad de escucharla en poscast, entrevistas o leer sus libros, hacerlo, pues aporta grandes ideas.
Aprovechando esta entrevista me gustaría dar las gracias a todas las personas de quienes he aprendido y que son parte de este artículo, a quienes me enseñan todos los días y gracias a mi colegio donde tanto aprendido. Gracias a todas las personas que han hecho posible esta publicación.
Y un agradecimiento especial a R. Javier Moreno y a EPALE por darme esta oportunidad en su espacio, su tiempo, su entrevista.
¡Aprendemos juntos!