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En 2019, la inteligencia artificial (IA) fue el tema del Año de la Ciencia. Un barco navegó a través de Alemania y permitió a jóvenes y viejos dedicarse a una estimulante ocupación con el tema. Pero la IA no sólo estaba en la agenda de la comunicación científica financiada públicamente. Varias publicaciones de libros, dossiers de periódicos y reportajes de televisión y radio llamaron la atención de aquellos que no la habían encontrado ya en blogs y otros canales digitales. Las evaluaciones del potencial de la IA varían entre una reverencia respetuosa y un juicio despreciativo.

"La inteligencia artificial puede ser imaginada como un niño de tres años", escribió Der Spiegel el 3 de diciembre de 2019. Después del cambio de año, ¿qué queda de este tema digno de mención para la educación de adultos? Después de todo, la IA se asocia más con robots y coches autopropulsados que con eventos educativos.

Uso de la IA en la educación de adultos

Si se observa más de cerca, los avances tecnológicos también afectan a la enseñanza y el aprendizaje de los adultos. No es de esperar que los instructores de los cursos y los planificadores de programas sean sustituidos por máquinas en unos pocos años. Los estudios en curso sobre el potencial de sustitución en el mercado laboral prevén que el trabajo humano siga siendo importante, especialmente en ocupaciones con una elevada proporción de orientación no normalizada. No, los seres humanos no amenazan con ser innecesarios en la educación de adultos; sólo las herramientas que los rodean y apoyan estarán cada vez más impregnadas por la IA.

Imagina a una persona llamada Ronald en el año 2025, que quiere asistir a un evento de educación superior en primeros auxilios. Si Ronald no utiliza el folleto del programa de la institución educativa en la que confía, será asesorado en la búsqueda de cursos por asistentes digitales as través de una búsqueda en Internet.

Las ofertas que se le muestren y recomienden dependerán en gran medida de su comportamiento de navegación previo y de sus preferencias espaciales y de valores. El hecho de que "sólo" algoritmos definidos o que la IA ya estén trabajando aquí depende de la capacidad de aprendizaje del algoritmo.

Para el 2025, las herramientas de búsqueda serán aún más inteligentes que hoy debido al autoaprendizaje activo. Probablemente, pero eso está por verse, las recomendaciones se basarán en principios de similitud, no en el principio de los opuestos productivos.

Futuro escenario 2025

Suponiendo que Roberto se decida por una oferta de aprendizaje mixto, entonces puede esperar encuentros con la IA tanto en la parte de la clase como en la parte online.

Comencemos con el primer encuentro cara a cara, en el que Roberto se asusta por la marioneta controlada por la IA, que comienza a toser después de los primeros intentos de resucitación, correctamente ejecutados, y luego le agradece de manera amistosa. La profesora Doris trajo materiales de enseñanza, cuya selección se apoyó en algoritmos y en la búsqueda de cursos de Ronald. Es posible que Doris haya utilizado una herramienta que revela la calidad de la búsqueda por ordenador. (como Kansas para cursos de aprendizaje de idiomas) (Enlace en Alemán).

En la parte en línea de su curso, las partes de la IA son probablemente más pronunciadas que en la parte presencial, ya que los actores que quieren utilizar el potencial de la IA participan más a menudo en el desarrollo de ofertas de aprendizaje online.

Ronald se hace amigo rápidamente de su tutor en línea, quien, sin ponerse gruñón, también está disponible después de las 11:30 horas, con consejos y apoyo. Roberto sólo se da cuenta de que hay un chatbot detrás del tutor cuando una vez colgó una frase divertida sin un guiño o emoji y el tutor no entendió la diversión. El hecho de que la IA tenga realmente sentido del humor y será probablemente todavía un sueño del futuro en 2025.

Menos difícil técnicamente, que cuestionable desde el punto de vista moral y jurídico son las posibilidades de la Analítica del Aprendizaje, que se sustentará en el software de aprendizaje. Se hará un seguimiento del comportamiento de aprendizaje de Ronald, en la medida en que sea legalmente permisible y Ronald lo haya aceptado: sus tiempos de aprendizaje, su progreso en el aprendizaje, sus errores, su comportamiento de interacción.

El software puede calcular una retroalimentación personalizada a partir de esto, con la ayuda de la cual él y Doris pueden discutir los próximos pasos de aprendizaje apropiados en la próxima reunión. Para Doris, esto hace su trabajo un poco más fácil, mientras que Roberto tiene un difuso sentimiento de inquietud y asombro incrédulo.

El sistema de aprendizaje también ha seguido aprendiendo mientras tanto.

Recomienda a Ronald en la próxima sesión online aquellas ofertas que el algoritmo considere especialmente adecuadas. La recomendación inteligente es una de las principales aplicaciones del aprendizaje automático detrás del software de aprendizaje. La mayoría de los sistemas de recomendación siguen estando capacitados para las similitudes de colaboración o de contenido. Esto significa que el sistema comprueba bajo qué comportamiento de interacción con el sistema o con qué preferencias temáticas Ronald había aprendido con éxito. Esto se refuerza en cada caso.

Para 2025, se podrían haber hecho progresos en comparación con una intervención pedagógica tan primitiva.

La IA como objeto de la educación de adultos

Este es un escenario que muestra en qué puntos la IA ha entrado o entrará en la implementación de la educación para adultos. Sin embargo, un segundo nivel es al menos igual de importante: la IA como el contenido o tema de la educación para adultos.

En vista del asombroso (tanto útil como amenazador) potencial de la IA, los adultos deben poseer una competencia básica en materia de IA para poder trabajar en un entorno de vida y de trabajo apoyado por la IA, así como para poder contrarrestar discursivamente una realidad potencialmente peligrosa de la IA con buenos argumentos.

El educador de adultos Michael Brendel ha escrito un libro con el título "Inteligencia Futura", con la intención por encima de todo de: invitar a una gran discusión social sobre la IA.

Esta función se adaptaría a las necesidades de la educación de adultos en la medida en que ella misma pudiera hablar sobre el tema, que pudiera entrar de manera competente en la planificación de programas y orquestar el diálogo.

Todo esto requiere, en primer lugar, una introducción al tema. Por ejemplo, a través del curso gratuito en línea "Elementos de la IA" (Enlace en Alemán), creado en Finlandia.

Volver a la semana temática "Educación Contemporánea"  en EPALE: ¿Cómo tratamos con la Inteligencia Artificial?

Sobre el autor: El Dr. Peter Brandt es jefe del departamento "Transferencia de conocimientos" del Instituto Alemán de Educación de Adultos - Centro Leibniz de Aprendizaje Permanente e.V. en Bonn.