La Tarjeta Europea de Estudiante nació en 2016 como un proyecto financiado por la UE. Facilitaba a los estudiantes el acceso a servicios en toda Europa sin necesidad de expedir una nueva tarjeta de estudiante durante su movilidad. En la actuada ya hay más de 2 millones de tarjetas activas en circulación en los países del Programa Erasmus+.

La Tarjeta Europea de Estudiante permite a las instituciones de enseñanza superior verificar de forma fiable y sin fisuras la situación de un estudiante a escala europea, confirmando que un estudiante está matriculado actualmente en una universidad u otra institución de enseñanza superior. 

Al adherirse al sistema ESC y basarse en las tarjetas de estudiante físicas o digitales existentes, las instituciones de enseñanza superior pueden centralizar los datos específicos de la tarjeta de estudiante, reducir el papeleo y promover la transición ecológica y digital. 

Para empezar a utilizar la tarjeta en su institución, acceda aquí.

La encuesta sobre la Tarjeta Europea de Estudiante 2023, que ya está abierta, está diseñada para recoger las experiencias de los estudiantes y las instituciones de enseñanza superior, así como sus ideas para el futuro. Se centra en:

• recopilar información sobre la aplicación de la tarjeta en los países del Programa Erasmus+
• medir la concienciación y recoger sugerencias de mejora
• comprender las necesidades de acceso a los servicios para estudiantes
• identificar los retos que pueden obstaculizar el pleno despliegue de la tarjeta a nivel nacional

Para participar en esta encuesta, pincha aquí. La encuesta se cierra el día 4 de diciembre.