Un ámbito de conocimiento al que se le otorga una importancia creciente en distintos niveles educativos es el acercamiento del centro educativo al patrimonio en sus diversas modalidades. El patrimonio se convierte en un espacio de aprendizaje privilegiado, activo, motivador y vivo, para crecer en este sentido. Y una ciudad como la nuestra, la milenaria Toledo ofrece un sin fin de espacios, paisajes, tradiciones, etc., inagotables a los que acercarnos con nuestros alumnos, en este caso adultos. 

En este sentido, el Centro de Educación de Personas Adultas Gustavo Adolfo Bécquer de Toledo es especialmente activo, proponiendo de manera habitual salidas y actividades extraordinarias en las que la propia ciudad se convierte en el aula. De manera concreta traemos a nuestro blog el reciente taller de damasquinado que se desarrolló el pasado 27 de febrero en el CEPA, dentro del programa Toledo Educa, organizado por la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Toledo. 

El damasquinado de Toledo es un arte milenario consistente en la incrustación de oro de 24k, oro de 18k y plata sobre una base de hierro dulce mediante cincel y martillo. Hoy en día se identifica de manera inequívoca con la ciudad imperial, aunque hay constancia de que se realizaron en el Antiguo Egipto, en Grecia y en Roma, así como en China y Japón. Se desarrolló notablemente en tiempos de al-Ándalus, sobre todo en Toledo usando la técnica de ataujía,​ hasta llegar a ser uno de los distintivos del arte hispanoárabe. No obstante, durante los siglos posteriores esta artesanía quedó en desuso; hasta que en el siglo XIS fue rescatada y mejorada con el desarrollo de una nueva técnica: el damasquinado. Fue la familia Zuloaga quien a mediados del siglo XIX introdujo y perfeccionó la técnica del damasquinado en Eibar (Guipúzcoa), y precisamente trabajadores eibarreses se trasladaron en 1875 a Toledo, donde arraigó de manera extraordinaria hasta nuestros días. 

Concretamente el taller se desarrolló en el aula 3 con los alumnos y alumnas de ESPA3 y ESPA4 del turno de mañana y asistieron un total de 23 estudiantes. El taller fue impartido por Oscar Martín Garrido de @espadasdetoledo, maestro damasquinador de la ciudad, que planteó una actividad eminentemente práctica, aportando a cada asistente el material necesario para realizar el proceso de incrustación de plata en el hierro. La satisfacción del alumnado asistente fue total, apreciando lo delicado y dificultoso del trabajo del damasquino y aprendiendo a valorar una de nuestras más afamadas artesanías de la ciudad. Durante el trascurso de la actividad los acompañó también el concejal de educación, Daniel Morcillo  #Toledoeduca, realizando la actividad como un alumno más.