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La voz de los alumnos y nuestra necesidad de construir comunidades

Los espacios de aprendizaje de adultos crecen cuando las voces de los alumnos son el centro, fomentando comunidad y agencia y transformando educación.

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Angeliki Giannakopoulou
learners

En nuestro mundo en constante evolución, la importancia de los espacios de aprendizaje para adultos va mucho más allá de las aulas tradicionales. Estos espacios son arenas vibrantes donde confluyen voces diversas, florecen ideas y se desarrolla un aprendizaje transformador. A medida que navegamos por las complejidades de la vida moderna y los retos mundiales, la capacidad de los entornos de aprendizaje de adultos para fomentar un sentido de comunidad y de autonomía entre los alumnos es cada vez más crucial. Exploremos por qué es tan esencial integrar las voces de los alumnos en los procesos de diseño y toma de decisiones de los espacios educativos.

Necesidad de la voz de los alumnos en la construcción de comunidades

Los espacios de aprendizaje de adultos son potentes catalizadores del desarrollo comunitario y el cambio social. No es de extrañar que la Unión Europea (UE) también lo reconozca, insistiendo en la necesidad de sistemas educativos inclusivos en los que los alumnos participen de forma significativa. La Recomendación del Consejo relativa a las competencias clave para el aprendizaje permanente destaca la importancia de fomentar la ciudadanía activa y la realización personal a través de la educación. Esto implica crear entornos en los que los alumnos puedan expresarse libremente, codiseñar sus experiencias de aprendizaje y participar en los procesos de toma de decisiones.

Recuerdo haberme encontrado con el libro de bell hooks’ "Teaching to Transgress: Education as the Practice of Freedom,"  por primera vez y fascinado por cómo hooks aboga por prácticas educativas basadas en el diálogo, el pensamiento crítico y el respeto mutuo. Sostiene que cuando se anima a los alumnos a cuestionar, criticar y colaborar, se convierten en agentes de cambio capacitados. Esta afirmación y este proceso son poderosos, ya que no sólo mejoran los resultados del aprendizaje individual, sino que también fomentan un sentido colectivo de responsabilidad y autonomía. Imaginemos espacios de aprendizaje para adultos que adopten los principios de Hooks, creando comunidades vibrantes donde se escuchen, respeten y valoren las diversas voces. ¡Esto es lo que estamos llamados a hacer! 

Según reveló el estudio de Learning and Work Institute , los alumnos que participan activamente en la configuración de su itinerario educativo muestran mayores niveles de motivación, retención y satisfacción general. Estos alumnos suelen convertirse en participantes activos en sus comunidades, contribuyendo a la cohesión social y al bienestar colectivo. Esto nos recuerda el papel fundamental que desempeñan los enfoques centrados en el alumno a la hora de transformar las experiencias educativas y dinámicas de comunidad más amplias. Al mismo tiempo, AONTAS, la Organización Nacional de Aprendizaje de Adultos de Irlanda, ha trabajado activamente para amplificar las voces de los alumnos e integrarlas en los procesos educativos y de elaboración de políticas. Por ejemplo, el Foro Nacional de Estudiantes de FET, organizado por AONTAS, ofrece una plataforma para que los estudiantes adultos de toda Irlanda debatan sobre su trayectoria educativa y pongan de relieve las áreas que necesitan mejoras. Estos foros facilitan el diálogo directo entre los alumnos y los responsables de la toma de decisiones, garantizando que las políticas y prácticas reflejan las necesidades y aspiraciones reales de los alumnos. El foro 2023 informa de que los alumnos identificaron problemas clave como la falta de transporte y de oportunidades de experiencia laboral, lo que dio lugar a esfuerzos de colaboración para abordar estos retos mediante la participación de las autoridades locales y las empresas. 

Por supuesto, al hablar de dinámicas comunitarias estamos obligados a enfrentarnos a nuestros privilegios y a reconocer las luchas de nuestras comunidades, ya que los modelos educativos tradicionales suelen perpetuar estructuras jerárquicas que marginan ciertas voces, en particular las procedentes de entornos subrepresentados o desfavorecidos. Recordamos a Gayatri Chakravorty Spivak, quien, en su ensayo fundamental «¿Puede hablar el subalterno?», nos interpela como ciudadanos y educadores sobre cómo una mayor segregación y marginación conducen a la exclusión de los discursos que dan forma a las vidas, dejando sin voz a partes significativas y sistemáticamente excluidas de nuestras comunidades.Esto significa que nuestras acciones deben concentrarse en crear espacios donde todos los alumnos, independientemente de su procedencia, puedan articular sus experiencias y perspectivas en un espacio seguro. 

En este contexto de nuestro predicamento, la verdadera democracia sólo puede lograrse cuando los individuos participan activamente en la configuración de las instituciones que rigen sus vidas. En la educación de adultos, esto se traduce en la creación de entornos de aprendizaje participativos en los que los alumnos puedan opinar sobre el diseño, la aplicación y la evaluación de los programas educativos. Sólo así las instituciones educativas podrán cultivar un sentido de propiedad y responsabilidad entre los alumnos, y construir una comunidad que contribuya activamente a dar forma a las sociedades. 

Aplicar la voz del alumno

Para aprovechar realmente el potencial de los espacios de aprendizaje de adultos como agentes de cambio, es crucial dar prioridad a las voces de los alumnos en todos los niveles de implementación. Esto implica adoptar un enfoque holístico que integre los procesos de expresión, codiseño y codecisión.

Expresión: Ofrecer a los alumnos la oportunidad de expresar sus pensamientos, ideas y experiencias es fundamental para crear entornos de aprendizaje inclusivos. Esto puede lograrse a través de diversos medios, como son los foros abiertos, los grupos de debate y las prácticas reflexivas. Por ejemplo, las reuniones periódicas en los centros educativos pueden ofrecer a los alumnos una plataforma para expresar sus preocupaciones y sugerencias directamente a los administradores y educadores. Valorar e incorporar las aportaciones de los alumnos crea un sentimiento de pertenencia y validación, esencial para el crecimiento personal y colectivo.

Codiseño: Implicar a los alumnos en el diseño de los programas educativos garantiza que sus necesidades, intereses y aspiraciones se aborden adecuadamente. Este enfoque participativo puede adoptar muchas formas, como el desarrollo colaborativo de planes de estudios, los proyectos dirigidos por los alumnos y las iniciativas basadas en la comunidad. Cuando los alumnos codiseñan sus experiencias educativas, es más probable que se sientan comprometidos, motivados e implicados en su proceso de aprendizaje. La formación de equipos de diseño integrados por alumnos, educadores y miembros de la comunidad para crear en colaboración el contenido de los cursos puede ser una aplicación práctica de este principio.

Codecisión: Los procesos de toma de decisiones en los centros educativos deben ser inclusivos y democráticos, y permitir a los alumnos dar forma a las políticas y prácticas. Esto puede facilitarse a través de consejos consultivos, estructuras de gobernanza participativa y mecanismos regulares de retroalimentación. Capacitar a los alumnos para que participen en la toma de decisiones fomenta una cultura de responsabilidad compartida y autonomía colectiva. La creación de consejos de alumnos o comités consultivos de alumnos puede ofrecer a los alumnos vías estructuradas para influir en las decisiones que afectan a sus experiencias educativas.

Retos y oportunidades

Hacer oír la voz de los alumnos en la educación de adultos es una promesa indiscutible, pero el camino hacia esta visión no está exento de dificultades. El más importante de ellos es la arraigada resistencia al cambio que existe en las instituciones educativas tradicionales. Las arraigadas jerarquías y estructuras de poder se erigen a menudo en formidables barreras que exigen un esfuerzo persistente y unificado por parte de alumnos, educadores, administradores y responsables políticos para redefinirlas y remodelarlas.

No obstante, garantizar que todos los alumnos tengan un sitio en las negociaciones no es tarea sencilla. Las disparidades socioeconómicas, las diferencias lingüísticas y los distintos niveles de educación previa pueden dificultar considerablemente la plena participación de algunos alumnos. Superar estos obstáculos exige planteamientos bien pensados y específicos: proporcionar apoyo y recursos adicionales contra la exclusión sistémica y cultivar una cultura que valore realmente la diversidad y la equidad.

En última instancia, tejer las voces de los alumnos en el tejido mismo de los espacios de aprendizaje de adultos es más que beneficioso: es fundamental. Cuando aprendemos a escuchar a los alumnos y a involucrarlos profundamente en la configuración de sus experiencias educativas, creamos espacios que empoderan a las personas e impulsan el cambio social. 

Mediante este planteamiento integrador y de colaboración podemos transformar la educación en una fuerza de equidad y crecimiento.

Más información en EPALE: 

El concepto y el contexto de la Voz del Alumno son profundos, con una gran cantidad de trabajos impresionantes ya realizados y bien documentados en EPALE. Si desea una visión más detallada, puede seguir explorando a continuación:

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Comentario

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Deirdre Finlay
Jue, 19/09/2024 - 00:03

A very thorough article. Next week, also in Ireland, one of the prinicpal topics of the Education and Training Boards Ireland conference will be Learner Voice and the link to Democracy. Very interesting!

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Isabel Loughran
Mar, 17/09/2024 - 13:36

Such an important topic and great to highlight the prevalence of work being done in Ireland to develop the learner's voice as central in Adult Education. 

On the VET side of things there is an upcoming event take a special focus to this topic and is happening next week ETBI Annual Conference 2024, from the Education and Training Boards.

 "Learners are at the centre of what ETBs do. At this year’s conference we will explore how we ensure their voices are heard across all ETB provision and are engaged in citizenship and democracy."

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